martes, 25 de febrero de 2014

IV DUATLÓN SOLIDARIO DE UTEBO 2014

Trofeo      
 
 
 
 
 
 
 
CRÓNICA DEL VIAJE AL DUATLÓN DE UTEBO
 

-ANTECEDENTES.
La mala suerte hizo que una semana antes de mi participación en este duatlón, me lesionara seriamente el brazo izquierdo, justo en la inserción del deltoides con el bíceps. Por este motivo tuve muy a pesar mío, que paralizar por completo todos mis entrenamientos y reducir a la mínima expresión mi actividad personal y comenzar con la medicación.

-VIAJE A UTEBO.
Me levanté pronto a las 6:00 horas de la mañana para tomar el desayuno y demás cosas, pero calculé muy mal la hora de la salida de mi casa y llegué a Utebo con el tiempo justo para saludar a los amigos -a Ignacio, Ana, Daniel, Oscar, Jesús y los jueces de la FATRI y demás personas de la organización- y tomar a los pocos minutos la salida con la inestimable ayuda de Oscar, para realizar el primer tramo de la carrera. Comentar que mi viaje en solitario hasta Utebo por la carretera comarcal fue una gran experiencia personal, pues nunca antes lo había hecho. La pena, es que como iba con el tiempo un poco justo, tuve que ir un poco más rápido de lo previsto y no pude gozar plenamente del viaje. A todo esto, hay que sumar el estrés provocado por que no sabía como iba a comportarse mi brazo lesionado durante el viaje. Pero llegué bien sin ningún problema. A las 10:30 horas nos dieron la salida y a los pocos metros, me di cuenta que aun estaba cansado y me había recuperado del "palo" de hacer los 15.53 kilómetros, que eran los que separaban desde el portal de mi querida casa, hasta la Plaza del Ayuntamiento, donde estaba instalada la salida/meta y la "zona de transición" del duatlón de Utebo.

-EL DUATLÓN.
Esta primera parte de la carrera, constaba de dos vueltas a un circuito de asfalto/tierra muy técnico para silla de ruedas, pero totalmente accesible. De todas formas, disponía de la gran ayuda de mi acompañante Oscar, para ayudarme en los sitios complicados del recorrido. La primera vuelta me la tomé para coger "ritmo de carrera", y en la segunda vuelta, ya metidos en la competición, pude ir más rápido, pero aparecieron los primeros síntomas de dolor en mi brazo. Miedos. Dudas. Todas estas cosas pasaron por mi mente cuando le di el relevo en la transición a mi compañero Jesús, que es el actual presidente de la FATRI y paratriatleta. Estos minutos mientras el volvía de hacer su recorrido, los utilicé para descansar, hidratarme gracias a la ayuda de Oscar que me trajo de todo y masajearme la zona dolorida del brazo. Cuando volvió Jesús de realizar el tramo de bicicleta, -que por cierto hizo un gran crono-, salimos los tres juntos para correr el último tramo de carrera. Desde el principio me marqué un "ritmo fuerte", pero a la mitad del tramo tuve que bajar un poco, porque el brazo empezó a dolerme con mayor intensidad, pero aun así, tuve fuerzas suficientes para hacer un "sprint a muerte" en la recta final antes de entrar a meta. Ya terminada la carrera, nos tomamos alguna bebida y comida que gentilmente la organización nos obsequió, para recuperarnos del esfuerzo realizado. A los pocos minutos se acercó Daniel Tello -el alma mater de este Duatlón-, para comunicarme que no me fuera, pues había quedado 3º en la categoría Veteranos Masculina C y tenía que subir al pódium. Me quedé mudo. No supe que decir. No podía dar crédito a lo que me estaba pasando. Esto era inaudito y no lo tenía previsto en el guión del día. La ceremonia de entrega de premios, fue para mi muy emocionante y cuando llegó mi turno, casi me emociono de alegría. Imposible comentar con palabras lo que sentí en esos momentos de felicidad. Por cierto tengo que decir, que es muy original y precioso el trofeo, que dentro de unos días me lo harán llegar. Como le dije a Daniel Tello, lo pienso colocar en el mejor sitio de mi casa, para que se luzca bien.
 
-VIAJE DE RETORNO A ZARAGOZA.
Como tenía dolores en el brazo lesionado, le pedí ayuda a Jesús para que me ayudara a subir la fuerte cuesta del puente de acceso a Monzalbarba. El generosamente se brindo a ello y con su ayuda pude subir la tremenda cuesta sin que petara el brazo, que era el miedo que tenía en esos precisos momentos. Nos despedimos y comencé mi viaje en solitario de retorno hacia mi casa. Me puse a ello y me marqué una velocidad lenta de crucero de 7/10 kilómetros por hora. Tenía que llegar si o si por mis propios medios a mi casa, ese era mi gran reto. Durante el viaje hubo momentos penosos motivados por el dolor y otros en los que pude disfrutar del soleado día que hacía y del paisaje que me rodeaba y de los aromas del campo. Se me hizo larga la vuelta a mi hogar ya que tardé más de horas en ello, no podía ir más rápido porque el brazo malo no me lo permitía y había que llegar lo mejor posible a mi casa. Llegando a mi ciudad me encontré casualmente con un grupo de amigos que me ayudaron generosamente a subir las dos cuestas de los puentes de acceso que hay justo antes de entrar en el casco urbano. Fue una mañana de encuentros, porque tuve la suerte de encontrarme con mi amigo Juan, que me acompañó un tramo y con su grata conversación, me hizo más ameno aquellos momentos. Pero la cosa aun no había terminado. Tenía que subir varias cuestas y me propuse hacerlo por mis medios sin ayuda y lo conseguí a base de duro esfuerzo. !Cuando por fin llegué al portal de mi casa, me convertí en la persona más feliz del mundo! ¡Había logrado mi reto!

-OBSERVACIONES.
A mi entender creo modestamente que he realizado algo importante. Hacer un viaje ida vuelta de 31 kilómetros, más participación en el Duatlón con un recorrido de unos 10 kilómetros, con el brazo izquierdo lesionado y sin poder entrenar durante una semana... ahí lo dejo amigos.

-AGRADECIMIENTOS.
Me gustaría dar mi agradecimiento personal a Ignacio Nicolás, por su ayuda previa a la carrera. A Oscar y Jesús por su ayuda y colaboración, todo un honor correr con ellos. A Daniel Tello, por su invitación un año más a este Duatlón que es un todo un referente para este país y del extranjero. A los jueces de la FATRI, por su ayuda y facilitar mi participación. Al C.C. de Utebo por su buen trabajo. A los voluntarios y público en general por animarme durante la carrera. A los fotógrafos por su genial trabajo (Ana Urrea, Alberto Casas, Isa Monjón, Alfredo Agustín Martín y a otros que no se sus nombres) y a los medios de comunicación, por hacer llegar este evento deportivo al público. Y por ultimo al y no menos importante, al público de esta bella localidad, animando con entusiasmo a los protagonistas de la gran fiesta, los atletas.

¡Muchas gracias a todos!
¡Nos vemos al año que viene!
 
 
Texto:
Joaquín Pacheco
Foto:
Alberto Casas
Foto trofeo:
Joaquín Pacheco Photo

viernes, 14 de febrero de 2014

SILLA ATLETISMO SOPUR TRACK TSA C14

 
 Trasera



 Vista lateral



 Escorzo



Vista frontal
 



 Detalle



Manillar
 
 
 
 
 
Damos por terminado el trabajo de restauración integral y personalización de mi nueva silla de atletismo. El trabajo se ha realizado totalmente de forma artesanal en mi taller y ha durado un mes. Y el resultado ha sido excelente.
 
 
Texto:
Joaquín Pacheco
Foto:
Joaquín Pacheco Photo